Los firmes principios de la sociedad tradicional se tambalean.
La fe en la razón y en el progreso ha fracasado en su búsqueda de la Utopía.
El escepticismo postmoderno engendra una sociedad líquida e inestable.
Es tiempo de buscar nuevas respuestas a las preguntas que nos llevamos haciendo desde hace siglos.
Es tiempo de cambiar la forma con la que pensamos la sociedad en la que vivimos.
Es tiempo de una sociedad plural y libre, donde cada ciudadano recree su mundo a partir de ideas heterogéneas, mestizas, incluso contradictorias; retales mentales que se combinan unos con otros para dar una visión propia e intransferible de la sociedad, pero en adecuación y en mínimo conflicto para con las de los demás.
Es tiempo del quiltting social.